Lo que más me gusta de Final Cut Pro es su interfaz fácil de usar. Es sencillo cortar los clips que quiero usar y colocarlos en una línea de tiempo. Puedo editar audio y corregir el color fácilmente.

Tiene una interfaz muy simple y fácil de usar y la curva de aprendizaje tampoco es tan pronunciada. No es complejo como Adobe Premiere Pro, que aleja a los usuarios debido a su complejidad. Tiene varios preajustes que están listos para ser utilizados en tus archivos de video, dando un aspecto profesional a tu video en minutos.

Cuando uso Final Cut Pro, me encanta lo eficiente y fluido que se pueden editar los videos; además, permite la colocación de audio al video. Esto es una ventaja, ya que me encuentro trabajando en proyectos de audio para los cuales necesito sincronizar el audio exportado con el video. Tener un software de edición de video cohesivo que me permita trabajar eficazmente en mis proyectos de video es fantástico.